QUICHÉ DE PATATA, ESPINACAS Y PUERRO

Hemos vuelto!!! Por fin!!! Desde agosto no nos veíamos las caras...

Lo primero pedir perdón por tan larga ausencia. Han sido unos meses muy intensos... Una boda, una mudanza, el viaje de novios, el trabajo... sí, lo sé, nada que no hagan el resto de bloggers y ahí siguen dando el callo, pero llegó un momento en que me di cuenta de que tendrían que maquillarme con rodillo el día de la boda para tapar las ojeras que se me estaban formando si no bajaba un poco el ritmo... así que tuve que prescindir de algunas actividades... aún así, ha merecido la pena... la boda fue perfecta y ahora que ya hemos vuelto del viaje y estamos un poquito más asentados, espero poder retomar el blog con el ritmo de antes... además Carlos tiene cámara nueva, así que tendrá que practicar mucho!!!

Volvemos con una receta que teníamos preparada desde hace tiempo pero que no habíamos tenido ocasión de presentar. La receta la saqué de un libro que compré un día en Cooking (ya os he hablado otras veces de esta tienda). El libro se llama Quichés y tartaletas, de la editorial Blume.

Yo soy una apasionada de las quichés... me parece un plato muy socorrido, y en mi congelador siempre hay masa quebrada dispuesta a recibir cualquier cosa que haya por la nevera... El libro me llamó la atención porque presentaba algunas ideas innovadoras para mí, en lo que a este plato se refiere.

En realidad, más que una quiché a m me recordaba más a una especie de tortilla de patata... pero estaba muy rica...

No os doy más la vara y pasamos a la receta.

INGREDIENTES

1 lámina de masa quebrada 2 patatas medianas 15 gr de mantequilla 1 cucharada de aceite 1 diente de ajo, picado 1 puerro en rodajas 250 gr de espinacas (descongeladas y escurridas) 75 gr de cheddar o gruyere rallado 2 huevos 70 ml de nata para cocinar 70 ml de leche

ELABORACIÓN

Forrar con la lámina de masa un molde desmoldable.

Pelar las patatas y cortarla en rodajas pequeñas. Derretir la mantequilla y el aceite en una sartén y añadir el ajo y las patatas. Se tapa y se deja cocer unos 5 minutos a fuego lento. Se retiran las patatas con una espumadera y las dejamos escurrir.

Añadimos los puerros a la sartén y los pochamos hasta que estén blanditos y reservamos.

Cocer las espinacas en una cazuela. Se escurren y las extendemos sobre papel de cocina para que pierdan todo el agua posible.

Precalentar el horno a 180ºC. Si queremos un resultado mejor horneamos primero la masa quebrada durante 15 min con peso encima y otros 15 sin peso. (Yo muchas veces me salto este paso y horneo la masa y el relleno todo de una vez).

Repartir el queso en el fondo del molde y extender la mitad de las patatas por encima, luego la mitad de las espinacas y después la mitad de los puerros. Volver a repetir las tres capas.

Batir los huevos, la nata y la leche y verter sobre el molde.

Hornear durante una hora y 20 min o hasta que el relleno haya cuajado.

BLOGUZZ: PRUEBA EL BACALAO CON LA SIRENA

Hace un tiempo, La Sirena me invitó, a través de Blogguz, a probar sus productos con bacalao.

Antes de empezar diré que siempre he oído muy buenas opiniones de los productos de La Sirena, pero nunca me he decidido a comprar nada porque siempre tengo el congelador a rebosar.

Por tanto la propuesta me hizo doble ilusión, primero por probar unos productos a los que les tenía ganas desde hace tiempo y segundo porque Carlos es un fanático del bacalao.

Primero de todo, la entrega y el packing inmejorable… Rapidísimo y todo bien empaquetado en una bolsa isotérmica.

No lo usé ese mismo día. Lo conserve unos días en el congelador (tuve que hacer sitio a base de recolocar y empujones) y un día que no tenía preparada cena lo saqué para probarlo.

Se prepara directamente congelado, lo cual es una ventaja para los olvidadizos como yo que cuando llega la hora de comer se les ha olvidado sacar el filete del congelador y hay que tirar de microondas (me horroriza) para descongelarlo…

Si tengo que decir algo no tan bueno, diré que las instrucciones de preparación de la caja se alejan bastante de la realidad… al menos en lo que a tiempos se refiere… Cuando habían pasado los minutos de preparación indicados en el paquete, los pimientos seguían hechos un bloque y duros como una piedra…

Sin embargo la preparación es muy sencilla… En el caso de los pimientos, calentar en sartén y en el caso de los nidos de patata con un golpe de horno basta.

Lo acompañamos de una ensalada de lechuga de hoja de roble, queso de Burgos, palitos de cangrejo y mix de frutos secos…Sencilla, pero le pegaba fenomenal y estaba muy muy rica.

Poco más que contaros… Ah si, lo más importante… Resultado: Aprobado. La verdad que yo, que no soy muy amiga de la comida precocinada, no sólo lo comí sino que lo disfruté. Si, efectivamente, no es lo mismo que unos pimientos rellenos caseros, pero 10 min de sartén, frente a toda una mañana de rellenar pimientos merece la pena al menos considerarlo y para que engañarnos… te apañan una cena rápida o una comida de estas a las 4 de la tarde en verano después de la jornada intensiva… (Cuando te pilla cansado, con calor y sin nada para comer).

HUEVOS EN COCOTTE

No tenía pensado publicar esta receta por varios motivos. La primera y principal, porque el aspecto del plato no me parece que haya quedado muy allá (aunque estaba bien rico) y la segunda porque hay recetas de este tipo en cualquier rincón de internet.

Sin embargo, las fotos han quedado taaaan bonitas... taaaan originales que tenía ganas de publicarlas...

Además es una de esas recetas que puedes hacerte una noche para cenar con un huevo y cualquier cosa que tengas por la nevera: fiambre, espárragos, queso...

Yo voy a poner la receta de los que hice, pero ya digo que podéis hacerlo con lo que os guste... y lo mejor de todo... si cenáis varios, cada uno se lo puede hacer a su gusto.

INGREDIENTES (para 1 persona)

• 1 huevo
• 1 cucharada de nata para cocinar (prescindible y sustituible por un chorrito de leche)
• 1 loncha de pavo
• Espinacas
• 1 poco de queso Emmental rallado
• Sal
• Pimienta
• Mantequilla (o aceite)para engrasar.

ELABORACIÓN

Engrasar una mini cocotte o recipiente para horno.

Poner queso de sobra en el recipiente y moverlo para que se adhiera a las paredes engrasadas. Retirar lo que sobre.

Cascar el huevo y añadir un chorritín de nata o leche teniendo siempre cuidado de no cubrir ni dañar la yema del huevo.

Añadir los ingredientes que se deseen. En este caso el pavo picadito y las espinacas.

No podía faltar mi consejo Mercadona: En el congelador siempre tengo una bolsa de espinacas congeladas de las que vienen en bolitas. Cogí un par de bolitas o tres y tal cual congeladas las puse en la mini cocotte.

Si te gusta mucho el queso puedes añadir ahora un poco más.

Salpimentar.

Hornear en horno precalentado a 180º durante 15 o 20 min.

CWK: CLAFOUTIS DE CHOCOLATE Y CEREZAS

WholeKitchen en su Propuesta Dulce para el mes de mayo nos invita a preparar un clásico de la cocina francesa, Clafoutis

Parece ser que finalmente lo he conseguido y eso que no las tenía todas conmigo...

Últimamente no tengo tiempo para nada... La boda cada vez está más cerca y sin darme cuenta las tareas relacionadas me roban progresivamente más tiempo.

No tengo tiempo ni de cocinar... tanto es así que ayer, liberé dos pajarillos atrapados en mi campana extractora (literal) pero eso es otra historia que ya os contaré.

Pero bueno, esta vez lo hemos conseguido y hemos llegado a tiempo.


Aquí os presento mi receta. Me apetecía hacerla con chocolate por eso de darle un poco de gracia al bizcocho ya que las frutas en la repostería no me hacen mucha gracia.

Busqué arándanos, pero al no encontrarlos me decidí por las clásicas cerezas. El resultado sorprendentemente bueno, tanto es así, que creo que la próxima vez lo haré sin chocolate.

La receta la adapté del blog Delicias y Tentaciones.








INGREDIENTES:

• 120 gr de cerezas
• 2 huevos
• 30 ml de leche
• 30 gr de maizena
• 60 gr de harina
• 50 gr de cacao en polvo
• 50 gr de mantequilla
• 30 gr de azúcar moreno
• 30 gr de azúcar blanca
• Azúcar glace para espolvorear

ELABORACIÓN:

Para empezar, deshuesamos las cerezas. Sólo si queremos, ya que en la receta original se ponen con hueso y todo... Y las colocamos en la fuente donde vayamos a hornear el Clafoutis.

En un bol mezclamos uno de los huevos con el azúcar blanca, la leche y la mitad de la harina. Mezclamos todo bien, intentando no introducir mucho aire a la mezcla.

Derretimos la mantequilla, al baño maría o al microondas y mezclarlo con el cacao en polvo.

Mezclamos el otro huevo con la harina restante y con el azúcar moreno y la maizena. Le añadimos el chocolate. Lo integramos todo bien y lo unimos a la primera mezcla.

Vertemos la masa final sobre las cerezas y horneamos en el horno previamente precalentado durante 20 minutos.

Cuando se haya enfriado podemos espolvorear el azúcar glace. (a mí al final se me olvidó)

CWK: BAVAROIS DOS CHOCOLATES (Primer asalto)

Sé que llego muyyyyyyyyyyyyy tarde, pero hemos estado de vacaciones (en otro momento os contaré como han sido estas dos increíbles semanas en Cuba acompañados de la mano por nuestra "familia" cubana) y aunque mi intención era dejar la entrada programada nada salió como yo esperaba.

Como la tenía preparada me daba pena no publicarla ya que, como sabéis, el trabajo que hay detrás es importante y más por Carlos que por mí, que se esfuerza en tener la fotos a tiempo, no quería que todo el esfuerzo cayera en saco roto, así que aquí os presento mi primera experiencia con los Bavarois.

Por último quería pediros perdón por la ausencia y que me temo que se va a prolongar... Dentro de cinco meses Carlos y yo nos casamos!!! Los que habéis pasado por esto sabéis que por mucho que te programes y por muy sencillo que lo quieras hacer, al final te lleva más tiempo del que pretendías y que junto con el trabajo, la casa y otros problemillas... al final tienes que priorizar y desgraciadamente, el blog ha sido el primer perjudicado...

Bueno, y sin más rollo paso a relataros mi experiencia con los Bavarois...

Mi hermana tiene la casa más bonita del mundo... Bueno vale, quizá estoy exagerando un poco, pero a mi me encanta... es un duplex enorme, lleno de niños, juguetes y risas resonando en cada rincón... tiene una terraza que es un capricho (donde están hechas las fotos) con un mini huerto en macetas que plantamos el pequeño y yo hace unos cuantos fines de semana...

Pero lo mejor, lo mejor, de la casa es su cocina... es la cocina de mis sueños. De mayor quiero tener una cocina como esa. La zona de fuegos, con península, amplia, con sitio para cocinar tres personas a la vez: la última vez mi hermana el primero (patatas con chorizo), a la vez, mi cuñado el segundo (pollo con salsa) y yo con el postre. Y en medio de todo este lío, Carlos con la cámara... Además tiene una zona de office para quien quiera hacer compañía o preparar una aperitivillo, mientras los demás trajinan... Y por si todo esto fuera poco, tiene thermomix! en fin, una delicia...

Pero bueno, lo que quería decir con todo esto es que la receta que hoy os presento, he tenido el "placer" de hacerla en esa cocina... Y digo placer entre comillas porque esta vez sufrí lo mío..

La idea original era un bavarois de tres chocolates con cobertura de chocolate y termino siendo un desastre dos chocolates sin cobertura y con cabreo.

La capa blanca está hecha con una receta que incluía claras a punto de nieve, yemas batidas con azúcar y nata montada. No decía nada de calor, así que la cosa empezó mal... no soporto el huevo crudo (es simplemente una cuestión psicológica), las claras pase... pero las yemas????? Total, que eso terminó siendo una mezcla llena de grumos que no tenía pinta de cuajar...

Me da rabia cuando alguna receta no me sale a la primera... pero más que por el fracaso, es por los ingredientes perdidos... Si, lo se, no puede salir todo bien y estoy aprendiendo... pero es que tirar comida me pone de los nervios...

Total, que en vista del fracaso decidí apostar sobre seguro y seguí (más o menos) la receta que proponían en el Círculo... La cosa fue mucho mejor, así que a pesar de todo, se me han quedado ganas de volver a intentarlo...


INGREDIENTES

• 100 gr de chocolate negro
• 200 ml de leche
• 2 yemas de huevo
• 30 gr de azúcar
• 1 lámina de gelatina
• 200 ml de nata para montar

ELABORACIÓN

En un recipiente con agua hidratar la lámina de gelatina y reservar.

En el fuego o en microondas, deshacer el chocolate con la leche con cuidado de que no se queme. Si lo hacéis en el microondas es mejor comprobarlo cada pocos segundos para evitar que se queme.

Batir las yemas con el azúcar hasta que la mezcla claree y añadir gradualmente la leche con el chocolate sin dejar de remover.

Calentamos esta mezcla a fuego lento hasta que espese (como si hiciéramos una crema inglesa) y la retiramos antes de que hierva.

Añadimos la lámina de gelatina bien escurrida y removemos hasta que se haya disuelto.

Refrigeramos hasta que esté fría sin que llegue a cuajar, removiendo de vez en cuando.

Mientras se enfría montamos la nata y cuando la crema esté fría añadimos la nata en varias tandas.

Vertemos todo en el molde (o moldes) donde lo vayamos a presentar y lo refrigeramos durante varias horas (lo ideal es toda la noche) hasta que cuaje.

NOTAS:

Si queremos hacerlo de dos o tres chocolates, hay que duplicar o triplicar los ingredientes cambiando en cada caso el tipo de chocolate.

Entre capa y capa hay que esperar a que la capa anterior cuaje para poder verter encima la siguiente sin estropear la anterior.

FOCACCIA DE ORÉGANO Y TOMATES SECOS

WholeKitchen, en su propuesta salada para el mes de abril nos invita a preparar Focaccia.

Esto si que era todo un reto… Ya lo intenté una vez y salió tan dura que podía haber amenazado a alguien con ella.

Esta vez traté de prepararme bien. Busqué en el libro “aprendiz de panadero” pero era un proceso demasiado largo y no tenía tiempo, busqué en el libro de la KitchenAid y finalmente busqué en google “focaccia con panificadora”.

Ya sabéis que adoro mi panificadora y sumado con el hecho de que ando pilladísima de tiempo me surgió la combinación que necesitaba.

El resultado no fue perfecto ni mucho menos (creo que quedó un poco cruda), pero al menos, esta vez nos la pudimos comer.

Acompañada con una salsa de tomate estaba rica rica…



INGREDIENTES

• 375 gr de harina
• 4 tomates secos,
• 175 cc. agua,
• 50 cc. aceite de oliva,
• 375 gr. harina,
• 1 cucharadita de azúcar,
• ¾ cucharadita de sal fina,
• ¾ romero seco picado
• 1 cucharada de levadura seca de panadería.
• Queso parmesano

Para acompañar

• Salsa de tomate

ELABORACIÓN
Hidratamos los tomates en agua templada durante unos 10 min y los troceamos.

Pulverizamos el romero con un robot de cocina.

Añadimos todos los ingredientes (excepto el queso parmesano) en la cubeta de la panificadora, empezando por los líquidos, y ponemos el programa de amasar (si no teneis panificadora, aquí podeis ver los tiempos para hacerlo a mano).

Una vez que ha terminado el programa, sacamos la masa sobre una superficie enharinada y amasamos por unos segundos y cubrimos con un paño limpio. Dejamos reposar 10 min.

Pasados los diez minutos estiramos la masa y hacemos una láminade unos 2-3 cm y dejamos reposar otros 40 minutos tapado con un paño limpio.

Pasado ese tiempo, con el dedo presionamos haciendo huequitos, y ponemos un chorrito de aceite por toda la superficie. Espolvoreamos queso parmesano.

Horneamos en el horno previamente precalentado a 190ºC durante 40 minutos.

MIS PRIMEROS FINANCIERS (CHISPAS)

Y probablemente los últimos… No es que estuvieran mal… la opinión general fue favorable. Es simplemente que el dulce y yo no nos llevamos bien.

No echo azúcar en el café, retiro la que viene en polvo encima de los dulces y el roscón, reduzco la cantidad en las recetas… y es que no me gusta. No me gusta y no me sienta bien. Si desayuno una tostada con mermelada, el mal cuerpo me dura hasta medio día…

Mi desayuno habitual: Un café (sin azúcar) y una tostada de pan con aceite de oliva y fiambre de pavo. Y si hemos cenado tortilla de patata y ha sobrado un cachito… entonces ya es fiesta… para desayunar: un café y pincho de tortilla… mmmm

En contra de lo que pueda parecer (ya que el número de recetas dulces creo que duplica o incluso triplica a las saladas) soy una persona eminentemente de salado. Y hay una razón para que la mayoría de las recetas sean dulces: mi público principal son los compañeros de trabajo a la hora del café… y como comprenderéis, a esas horas, unos calamares en su tinta como que no…

En otra ocasión lo intentaré con chocolate… eso sí, el chocolate sí me gusta…


WholeKitchen en su Propuesta Dulce para el mes de Marzo nos invita a preparar un clásico de la gastronomía francesa, Financier.

INGREDIENTES: (Para 6 financiers) · 40 gr de azúcar glace · 40 gr de harina · 40 gr de almendra en polvo · 60 gr de mantequilla · 4 claras de huevo

ELABORACIÓN:

Derretimos la mantequilla a fuego lento.

Mezclamos con insistencia el azúcar, la harina y la almendra en polvo, hasta que la mezcla sea muy muy homogénea.

Batimos las claras de huevo, sin llegar a montarlas y las mezclamos con cuidado con el azúcar, la almendra y la harina.

Mezclamos también la mantequilla.

Engrasamos los moldes (yo lo hice con papeles de madalena para evitarme este paso) y repartimos la mezcla en ellos.

Lo introducimos al horno, previamente precalentado a 180º durante 20 min.

QUICHÉ DE JAMÓN Y CALABACÍN

WholeKitchen en su Propuesta Salada para el mes de Marzo nos invita a preparar un clásico de la gastronomía francesa, Quiche.

Me encantan las Quiches. Me parece un plato muy cómodo y socorrido. Lo puedes hacer con cualquier cosa que tengas en la nevera (champiñones, bacon, jamón, queso, espinacas, puerro, calabacines...). En casa siempre tengo en el congelador un par de láminas de masa quebrada para los días que no sé qué hacer de cena, o para cuando algún amigo viene a verte, y si no tienes nata lo puedes hacer con leche...

Normalmente yo lo hago con láminas de masa compradas, pero si te surge una emergencia con harina y mantequilla puedes hacerla fácilmente...

En fin, que con cuatro cosas básicas (harina, mantequilla, huevos y leche) y cualquier cosa que tengas por la nevera puedes hacer este plato tan apetitoso que siempre triunfa...

La receta está sacada (aunque con mis modificaciones) del libro “Quiches y tartaletas” de la editorial Blume.

Esta vez la hice con leche, por aquello de reducir las grasas...

INGREDIENTES

Para la masa:

• 250 gr de harina
• 125 gr de mantequilla fría cortada en trocitos
• 3 o 4 cucharadas de agua fría

Para el relleno

• 150 gr de jamón (yo lo puse de York, pero creo que la receta era con Serrano)
• 1 puerro (en sustitución a la cebolla que no puedo con ella)
• 1 calabacín
• 3 huevos
• 230 ml de leche
• 25 gr de parmesano
• Aceite de oliva

ELABORACIÓN

Para la base

Se tamiza la harina en un cuenco y se añade la mantequilla cortada en cachitos pequeños. Con ayuda de los dedos mezclamos ambas rápidamente hasta que quede con aspecto de migas de pan.

Se hace un hueco en el centro y se añaden tres cucharadas de agua y con ayuda de una espátula mezclamos los ingredientes hasta que la masa ligue.

Sobre una superficie enharinada se forma una bola con la masa. La envolvemos con film transparente y la dejamos enfriar en la nevera unos 20-30 min.

Una vez ha pasado este tiempo sacamos de la nevera y con la ayuda de un rodillo estiramos la masa hasta que quede bien finita... como unos... 3 mm.

Colocamos la lámina sobre un molde para Quiche (o cualquier otro recipiente apto para horno) y con la ayuda de una bolita de masa sobrante pegamos bien la lámina al fondo y a los bordes.

Recortamos los bordes que sobren.

Mientras precalentamos el horno a 200 gr, volvemos a meter la masa (ya en el molde en la nevera)

Horneamos a ciegas, que quiere decir que ponemos encima un papel de horno y peso (como por ejemplo unas legumbres secas) y horneamos durante 15 minutos.

Pasado el tiempo sacamos del horno, quitamos el papel y el peso y horneamos otros diez minutos.

Retiramos el horno y dejamos enfriar.

En los tiempos entre reposar, hornear, enfriar, etc... preparamos el relleno.

Cortamos el jamón en trocitos. Reservamos.

Lavamos bien y cortamos los calabacines en rodajas finas (no es necesario quitarle la piel). Reservamos

Limpiamos y picamos el puerro. Reservamos.

En una sartén con un poco de aceite salteamos el jamón y retiramos.

En el mismo aceite pochamos el puerro hasta que esté blandito y retiramos.

En la misma sartén salteamos los calabacines hasta que estén tiernos, salpimentamos y retiramos.

En un bol mezclamos los huevos, la leche y la mayor parte del parmesano.

Sobre la base que ya tenemos horneada ponemos el jamón, el puerro y los calabacines.

Añadimos la mezcla que hicimos en el bol y espolvoreamos el queso restante.

Horneamos durante 35 minutos más.

NOTAS

Para mi gusto la masa quedó demasiado horneada... quizá podrían reducirse los tiempos de horneado.

Que me perdonen los más puristas, pero los tiempos de reposo, enfriar... etc, hacen que el proceso sea demasiado largo y tedioso. Yo no los suelo seguir al pie de la letra... si estoy haciendo otra cosa, dejo que la masa repose... si no, la uso... la verdad que no he notado diferencias entre reposarla 20 minutos o reposarla 10.

Si vas a hacer la masa en KitchenAid tienes que tener la precaución de no amasar demasiado para que la masa no se quede dura. Lo mejor es mezclar a intervalos cortos de unos 10 sg. Si se forma una bola en el centro es que hemos amasado demasiado. Lo suyo es que los ingredientes se aglutinen y luego formemos la bola con las manos sobre la superficie de trabajo.

MI VERSIÓN CORTA PARA HACER UNA QUICHE

Para aquellos que se han visto abrumados por tanto reposar enfriar y hornear, esta versión es muy resultona y es apta para todos los públicos...

Mientras descongelas una lamina de masa quebrada preparas el relleno (sofríes calabacines, cueces espinacas, fríes bacon, picas jamón... up to you!)

En un bol mezclas los ingredientes de la Quiche (calabacín, bacon, queso, espinacas...) con los huevos batidos (2 o 3) y un brick de los pequeños (200 ml) de nata (o leche si lo quieres más ligerito). ¡¡¡Acuérdate de salarlo!!!

Colocas la lámina de masa quebrada en una bandeja de horno (si quieres hacerla un poco más fina puedes estirarla antes un poco con un rodillo (o botella o vaso de tubo) y viertes por encima la mezcla.

Hornea a 180ºC durante unos 30 min o hasta que veas que el relleno ha cuajado.

Y para dar la nota de credibilidad a mi versión os diré que la mujer francesa de un gran amigo no hornea la masa antes de añadir el relleno, deja que todo se haga a la vez... Y doy fe que hace una de las mejores Quiche Lorraine que he probado nunca.

TRUCOS: Cómo darle al vuelta a un crep relleno

Para muchos puede ser una cosa ya sabida... pero es un truco que a mí me ha sido muy útil.

Cuando iba a cenar a alguna creperie veía que presentaban los crepes en paquetitos cuadraditos perfectos así que un día lo hice en casa.

Aquí os dejo un paso a paso muy sencillo para quien pueda interesarle.

1. Coloca el crep en un plato que NO sea en el que lo vas a servir y pon el relleno encima.
2. Dobla los bordes de dos en dos. Los dos primeros sin que lleguen al centro.
3. Los dos últimos encontrándose en el centro.
4. Coge el plato en el que vas a servir el crep.
5. Agarrándolo como en la foto colócalo encima del plato que tiene el crep.
6. Con un juego de muñecas da la vuelta a los dos platos.

Espero que os haya gustado este fototutorial.

CLÁSICOS BÁSICOS: Salsa besamel

Hoy os traigo una nueva sección: CLÁSICOS BÁSICOS, donde iré publicando todo aquello que usaremos asiduamente en la cocina y como complemento a otros platos.

Vamos a empezar con la Salsa Besamel.

Llevo un rato pensando en cómo poner las cantidades para esta receta y es que lo siento, pero es una de esas cosas de... ¿pero cuánta harina?... Depende.

¿De qué depende? Pues principalmente del uso que le vayamos a dar, así para unas croquetas, necesitaremos una salsa espesa y para gratinar unos canelones, una salsa más ligera.

Paso a deciros cómo suelo yo calcular:

INGREDIENTES

• Aceite de oliva
• Harina
• Leche
• Sal

ELABORACIÓN

A mí me gusta muchísimo la besamel, soy de las que piensan que nunca sobra y procuro hacer siempre una buena cantidad.

Preparamos la leche en un sitio a mano, pues en el momento en el que haya que añadirla no nos podremos entretener en ir a la despensa a por ella porque se nos quemaría la harina.

En una sartén grande echamos un chorrito de aceite, ni mucho ni poco, más o menos para cubrir el fondo.

Añadimos la harina. Yo suelo echar dos tenedores (si, lo se, los tenedores no son una medida muy precisa, pero es la medida que yo tengo cogida). Con un tenedor de madera, cogemos harina con la punta dos veces (calculo que serán como unos 20 gr) y lo disolvemos con el aceite.

Aquí es donde nos damos cuenta si nos falta aceite o harina. La mezcla no tiene que ser un barrillo ni hacer grumos, ni tampoco tiene que verse que hay aceite de sobra.

Ahora ponemos la sartén a fuego medio y tostamos la harina para que no tenga sabor a crudo. Pero mucho cuidado que no se queme.

Cuando la harina está tostada añadimos un poco de leche. Seguramente se nos hará un barro lleno de grumos. No pasa nada, pasamos a las varillas y removemos, removemos, removemos... si vemos que se nos quema, bajamos un poco el fuego y seguimos añadiendo leche hasta que la besamel tenga la consistencia necesaria, siempre teniendo en cuenta que cuando enfríe va a espesar aún más.

Salamos al gusto.

NOTAS

No os olvidéis de remover. Si lo hacéis con unas varillas no queda ni un grumo.

Para que la besamel ligue y no nos quede el aceite por un lado y la leche por otro tiene que hervir.

Cuanta más leche añadas, más cantidad de salsa, pero más líquida.

Si llegamos al final y nos damos cuenta horrorizados de que no tenemos cantidad suficiente para lo que queremos, no os preocupeis, que la cosa tiene "fácil" solución: Volvemos a empezar con el aceite y la harina y después, en lugar de añadir leche, añadimos la besamel que ya habíamos hecho y, como quedará más espesa, añadimos más leche... ya tenemos más.

REGALO CÍRCULO DULCE FEBRERO

Ya tengo en mis manos el regalo que gané con el concurso del Círculo Dulce organizado por WholeKitchen. (Bueno vale, llego hace días).

Me gustaría haberlo presentado con alguna receta, pero no he tenido mucho tiempo últimamente, aunque sí que he estado mirando opciones y no termino de decidirme... ¿Alguna sugerencia?.











Prometo enseñaros los primero que haga con estos maravillosos moldes.

Gracias de nuevo a WholeKitchen por la organización del concurso.

CREPES CON NATA Y CHOCOLATE

Wholekitchen en su Propuesta Dulce para el mes de febrero nos invita a preparar todo un clásico de la gastronomía francesa, Crepes.

Sí, lo se, el acompañamiento es de lo más básico y poco original pero es que, quería aprovechar para hablaros del restaurante donde he comido las filloas con nata y chocolate más ricas de toda mi vida.

Hay un restaurante en Madrid (C/Coslada 2) llamado Chiquito Riz donde Carlos y yo vamos muy a menudo por dos motivos básicos: la calidad y el precio.

Su carta, en la que predominan los pescados y mariscos, incluye un menú degustación que dice ser para uno, pero doy fe de que dos personas comen más que de sobra con él. El menú incluye entrantes (ensalada de ventresca y pimientos, pulpo, chopitos, chistorra y morcilla), un segundo (carne a la piedra o dorada a la sal) y un postre.

El pulpo es el más tierno que he comido yo nunca y la dorada se deshace en la boca, pero ¡ay amigos! el postre... esas filloas con nata y chocolate ¡menudo chocolate!

Así que por eso he querido hacerlas de este modo, y aunque me he acercado bastante, no consigo que sea igual.

Para la receta de los crepes he usado la que viene en el libro que os presenté ayer

INGREDIENTES

Para los crepes:

• 100 gr de harina
• 25 gr de azúcar
• 25 gr de mantequilla derretida
• 2 huevos
• 250 ml de leche
• Sal
• Aceite para engrasar

Para el relleno

• 200 ml de nata para montar
• Azucar
• Crema de cacao
• Leche

ELABORACIÓN

En un recipiente ponemos la harina, los huevos, el azúcar, la mantequilla derretida, la leche y una pizca de sal.

Mezclamos bien y si vemos que han quedado grumos, pasamos por un colador.

Untamos la crepera (o en su defecto la sartén) con un poco de aceite y con un cazo, echamos la masa, movemos la sartén para que cubra todo el fondo. Cuando está cuajada le damos la vuelta y la doramos un poco por el otro lado.

Es bastante habitual que la primera tengamos que desecharla.

La sacamos a un plato donde iremos apilando todas las que hagamos a continuación.

Para el relleno:

Montamos la nata con un poco de azúcar y reservamos.

En un cazo al baño maría, derretimos la crema de cacao (nutella, nocilla...). Añadimos algo de leche para aligerar.

Sugerencia de presentación:
Enrollamos el crepe con la nata dentro y decoramos con el chocolate líquido.
Adornamos con unas flores de nata.

NOTAS: Con esta cantidad de masa salen como unas 6-7 piezas.

Descárgate aquí la versión para imprimir.